miércoles, 1 de diciembre de 2010

Retinopatía Diabética (enfermedad sobre la ceguera)

La retinopatía diabética engloba diversas alteraciones patológicas de la retina características de la diabetes crónica.

Se trata de una causa importante de ceguera, siendo especialmente grave en los diabéticos que requieren insulina (Diabetes Mellitus insulino dependiente), aunque también se da con frecuencia en no insulino dependientes de larga evolución. El grado de retinopatía está estrechamente relacionado con la duración de la enfermedad.

A medida que la Diabetes se va desarrollando, los niveles anormalmente elevados en sangre de azúcar van lesionando los vasos sanguíneos, los nervios y otras estructuras. Ciertas sustancias derivadas del azúcar se acumulan en las paredes de los pequeños vasos sanguíneos, provocando su engrosamiento y posible rotura. Al aumentar el grosor de los vasos, estos cada vez pueden aportar menos sangre y se producen las temidas complicaciones de la enfermedad.

La ceguera por diabetes es particularmente invalidante. El sistema de vida del diabético se va a ver especialmente perturbado por los problemas oculares. Aspectos como la problemática de la visión de los colores (necesaria para los tests de glucemia), la dependencia para inyectarse insulina en caso de pérdida de visión o la falta de sensibilidad táctil para la lectura Braille, hacen que el diabético con severa pérdida de visión tenga un sistema de vida diferente y su dependencia de terceros sea inevitable.

Si el paciente acude a la consulta en un estadio muy avanzado, cuando ya tiene una hemorragia vítrea o un desprendimiento de retina, el láser ya no es eficaz y en este momento hay que recurrir a técnicas quirúrgicas muy complejas como la vitrectomía, donde el pronóstico visual es muy pobre.

Un buen control de la diabetes y de sus complicaciones oculares puede reducir el riesgo de ceguera en un noventa por ciento. Es importante adoptar un papel activo en el control de esta enfermedad.


No hay comentarios:

Publicar un comentario